martes 25 marzo 2008
Poco se conoce del Tíbet antes del
siglo VII. Desde este siglo hasta el
siglo X el Tíbet fue un país independiente en donde la tierra era poseída por familias nobles, monasterios budistas y pequeños terratenientes. Esta forma de sociedad se mantuvo hasta
1930. En aquel entonces 700.000 personas eran siervos en una población total de 1,2 millones de habitantes.
En el
siglo XIII el Tíbet fue dominado por el
Imperio Mongol. Los gobernantes mongoles le dieron gran autonomía secular a la escuela de Sa-skya del budismo tibetano. Durante tres siglos el Tíbet siguió siendo gobernado por dinastías seculares. En el
siglo XVI Altan Khan de la tribu mongol de Turnet le dio respaldo al gobierno religioso del
Dalai Lama, siendo el budismo la religión predominante entre mongoles y tibetanos. En el
siglo XVII el
jesuita António de Andrade logra atravesar las montañas del Himalaya y penetrar en el Tíbet, convirtiéndose en el primer europeo en conseguirlo.
Al principio del
siglo XVIII China envió un comisionado chino a
Lhasa para hacerse cargo del gobierno. Diferentes facciones tibetanas se rebelaron contra el comisionado, el cual fue asesinado. Posteriormente el ejército Qing invadió el Tíbet y derrotó a los rebeldes, reinstalando a otro comisionado. Dos mil soldados chinos permanecieron en el Tíbet y sus labores defensivas fueron apoyadas por fuerzas locales organizadas por el comisionado.
En
1904 los británicos enviaron un fuerte contingente militar y ocuparon Lhasa, forzando en esta forma la apertura de la frontera entre la
India y el Tíbet. En 1906 los británicos firmaron un tratado con China por el cual el Tíbet se convertía en un protectorado británico.
En
1907 se firmó un nuevo tratado entre
Gran Bretaña,
China y
Rusia donde se le daba a China la soberanía sobre el Tíbet. En
1910 el poder central
Qing ejerció por primera vez el gobierno directo sobre el Tíbet. Sin embargo, en
1911 el estallido de la guerra civil en China obligó a las tropas de este país estacionadas en el Tíbet a regresar a aquel país, oportunidad que aprovechó el Dalai Lama para restablecer su control sobre el Tíbet. En
1913 el Tíbet y
Mongolia firmaron un acuerdo reconociendo su mutua independencia de China. En
1914 se negoció un tratado entre
China, Tíbet y
Gran Bretaña denominado
Convención de Simla. Durante esta convención los británicos trataron de dividir al Tíbet en dos regiones, lo cual no prosperó. Sin embargo los representantes de Tíbet y de Gran Bretaña firmaron un acuerdo a espaldas de China, mediante el cual el Tíbet sería una región autónoma de China y los británicos se adjudicarían 90.000 kilómetros cuadrados de territorio tradicionalmente tibetano que corresponde al actual estado de
Arunachal Pradesh. Después de declarada la independencia de
India, esta nación consideró esta región como suya en función a la frontera establecida en el mencionado tratado. China, sin embargo, rechazó tal posición, indicando que dicho tratado no tenía ninguna validez ya que no fue firmado por ellos y el Tíbet no era una nación independiente, sino un protectorado de China. La disputa por esta región ocasionó la guerra entre China e India en
1962.
China, sin embargo, nunca renunció a su hegemonía sobre el Tíbet. En
1950 el ejército chino invadió el Tíbet, derrotando fácilmente al débil ejército tibetano. En
1951 se redactó el Plan para la Liberación Pacífica del Tibet, el cual fue firmado por representantes del Dalai Lama y el Panchen Lama bajo la presión del gobierno chino. Este plan contemplaba la administración conjunta del gobierno chino con el gobierno del Tíbet. En aquella época la mayoría de los tibetanos vivían bajo un régimen de servidumbre por cuanto la mayor parte de la tierra era poseída por los lamas. El plan fue implantando pero no sobre todo el territorio, por cuanto las regiones de Kham Oriental y Amdo fueron consideradas como provincias chinas, llevándose a cabo una reforma radical de la tenencia de las tierras. En junio de
1956 y a consecuencia de esta reforma, estalló una rebelión en estas dos regiones, la cual, respaldada por la
CIA estadounidense, se extendió hasta
Lhasa. El ejército chino logró doblegar la rebelión en
1959, en acciones militares que ocasionaron la muerte a miles de tibetanos. El decimocuarto
Dalai Lama y sus principales colaboradores huyeron a la India, desde donde siguieron respaldando acciones rebeldes contra el ejército chino hasta
1969 cuando la CIA decidió no proveer más ayuda.
Aunque el Panchen Lama estaba virtualmente prisionero en Lhasa, los chinos lo mostraron como el jefe del gobierno del Tíbet en ausencia del Dalai Lama, quien tradicionalmente había sido el gobernante del país. En
1965 China introdujo cambios sustanciales cuando desposeyeron de las tierras a los lamas e introdujeron la educación secular. Durante la
Gran Revolución Cultural Proletaria en
China el Tíbet sufrió serios daños a su
patrimonio cultural, incluyendo su herencia budista. Más de 6000 monasterios budistas fueron destruidos y varios monjes y monjas budistas fueron asesinados o hechos prisioneros.
[cita requerida]Desde
1979 se han venido haciendo reformas económicas, pero no políticas. Las acciones de China sobre el Tíbet pueden considerarse, sin embargo, como moderadas. La mayor parte de la libertad religiosa ha sido restituida siempre que los lamas no cuestionen el derecho de China a gobernar al Tíbet
Bandera del Tíbet antes de
1950 y de su posterior gobierno en el exilio. Esta versión fue introducida por el 13
er.
Dalai Lama en
1912En
1989 el
Panchen Lama falleció, y el
Dalai Lama y el gobierno de China reconocieron diferentes reencarnaciones. A pesar que el gobierno chino se considera ateo, insistió en reconocer oficialmente la reencarnación del Panchen Lama, de acuerdo a la tradición
Vajrayana budista. Para ello se valieron del procedimiento que se utilizó en la
dinastía Qing mediante el cual el
Panchen Lama era elegido en una especie de lotería utilizando una urna de oro donde el nombre de los posibles Panchen Lama estaban insertos en bolas de cebada. Por su parte el Dalai Lama nombró a Gedhun Choeky Nyima como el undécimo Pachen Lama, mientras que el gobierno chino eligió al niño llamado Gyancain Norbu. Gyancain fue criado en Beijing y aparece en público muy esporádicamente. Choeky y su familia, de acuerdo a los exiliados tibetanos, parecieran estar prisioneros. El gobierno chino afirma que está libre bajo una identidad falsa a fin de proteger su privacidad.
En la actualidad si bien existen discrepancias acerca de cuan opresiva es la dominación china en Tíbet, lo cierto es que internacionalmente se considera esta región como parte de China y ningún país extranjero ha reconocido al gobierno en el exilio del Dalai Lama.
Lo que sí parece ser cierto es que si bien las condiciones de vida en el Tibet han mejorado considerablemente bajo el régimen chino, la
Revolución Cultural (
1966-
1976) y la actual y continua inmigración de chinos
Han han erosionado seriamente la cultura y las tradiciones de este pueblo y violado sistemáticamente los derechos humanos de los tibetanos que expresan su descontento frente a la ocupación china. En marzo de 2008 se desencadenó una revuelta con un aún desconocido número de víctimas, asi como de gente implicada en estas protestas y los motivos concretos de estas en este momento. China, durante estas protestas, expulsó a los medios de comunicación internacionales del Tibet, con intención de proteger su seguridad, lo que levanta sospechas, entre algunos medios, sobre el grado de represión llevado a cabo por el ejército chino. El partido Comunista chino dijo que "aplacaría" a los manifestantes y envió cerca de seis mil militares a la zona. Las últimas imágenes de televisión mostraban tanques entrando en Lhasa, la capital del Tíbet.
[1] Extraída de wikipedia: http://es.wikipedia.org/wiki/T%C3%ADbet